lunes, 30 de noviembre de 2009

¿PORQUE LOS ALUMNOS DESERTAN EN MATEMÁTICAS?

Matemáticas, No!!!!
¿Las matemáticas son tan aburridas como parecen? Creo que NO, todo depende desde que perspectiva. La miremos Según Galileo Galilei: "Las Matemáticas son el alfabeto con que Dios ha a escrito el Universo".
Miedo a las matemáticas.-
El efecto de las emociones en el aprendizaje de esta disciplina recién está empezando a ser investigado, pero ya se cuenta con datos concretos: un clima negativo hacia esta materia en el aula puede determinar 50 puntos menos en pruebas como el Simce.
* Un grupo de investigadores planteó un problema a los niños: En un barco hay 7 cabras y 5 ovejas. ¿Qué edad tiene el capitán? La mayoría multiplicó 7 x 5, sin cuestionarse la pregunta.
* Si bien el miedo hacia las matemáticas empieza a formularse en básica, es cuando se acerca la enseñanza media que se pone de manifiesto.
Por: Elizabeth Simonsen

¿Alguna vez se sintió paralizado frente a un ejercicio de matemáticas, especialmente si tenía que salir al pizarrón? ¿Piensa que las matemáticas son para "cerebros" y están desprovistas de fantasía o creatividad? ¿Siente que nunca fue bueno para ese ramo? Temor a responder en público, inseguridad o pensar que el profesor es un "ogro", son algunas de las emociones más comunes que se evidencian frente a las matemáticas y que recién comienzan a tomarse en cuenta como parte trascendental de la enseñanza de esta disciplina, porque bloquean de tal manera al individuo que impiden su aprendizaje. Según investigaciones de Juan Casassus, asesor internacional en temas de educación, hasta 50 puntos menos en el Simce pueden deberse a un mal clima emocional en el aula hacia esta materia."En la investigación en educación matemática se ha trabajado más las dimensiones cognitivas, pero menos la influencia de las emociones. Es esencial en todas las situaciones de aprendizaje, lo que el alumno sienta es tan importante como lo que piensa", afirma Inés María Gómez-Chacón, de la Universidad Complutense de Madrid y una de las pioneras en incursionar en la investigación de matemáticas y emociones. Si bien se ha abordado el papel de las emociones en el aula en general, el tema se ha centrado especialmente en matemáticas. ¿Por qué? Como se trata de una disciplina que requiere un pensamiento abstracto, es una de las materias más difíciles de abordar para el estudiante. "Por otro lado, los profesores están más interesados en los resultados que en el proceso en sí, por lo que suelen no enseñar con la didáctica adecuada", dice Casassus. Según las investigaciones, lo que dificulta el aprendizaje de las matemáticas son creencias relacionadas con ellas (por ejemplo, que "son inalcanzables" o creadas para gente muy inteligente), creencias acerca del estudiante (la más común, falta de confianza en sí mismo) y mitos acerca del profesor, donde el alumno siempre es considerado un "aprendiz". Desde este punto de vista, el docente de este ramo suele alcanzar tal nivel de autoridad que los estudiantes no se atreven a cuestionar lo que él señala. Para demostrarlo, en los años '80 un grupo de investigadores franceses planteó el siguiente problema a alumnos de 7 a 10 años: En un barco hay 7 cabras y 5 ovejas. ¿Qué edad tiene el capitán del barco?". La mayoría de los alumnos respondían sin titubear: 7 x 5: 35. Y sin siquiera pensar que la pregunta estaba mal formulada.

Didáctica inadecuada


"Los profesores se enfocan sólo en los resultados, los alumnos los siguen en la pizarra pero sin comprender en realidad la reflexión que existe detrás de cada operación", dice Casassus. Por ello, los estudiantes tienen dificultades para planificar y regular sus procesos de conocimiento, es decir, no logran organizar un plan de acción y llevarlo a la práctica de manera coherente, autónoma y flexible. Otros caen en una errada concepción frente a la disciplina: "Muchos estudiantes creen que los problemas se pueden resolver mediante la aplicación directa de hechos, reglas y fórmulas, por lo que sólo están motivados para memorizar reglas y fórmulas y no en reflexionar desde el punto de vista matemático", dice la investigadora. Así, la historia repetida de fracasos lleva a los alumnos a dudar de su capacidad intelectual en relación a las matemáticas y a considerar como inútiles sus esfuerzos para aprenderla, exageran la magnitud de sus deficiencias, se sienten frustrados, tienen bajas expectativas de éxito y abandonan rápidamente la actividad. Más adelante, ante nuevos ejercicios, desarrollan una actitud negativa que bloquea el aprendizaje. Y si bien estas percepciones comienzan a formarse en la primaria, recién es en la secundaria cuando toman fuerza y se vuelven explícitas. Por eso, la investigadora española ha diseñado algunas estrategias para mejorar la didáctica de las matemáticas. Por ejemplo, a relacionar las matemáticas escolares con la vida informal, de manera de acercarla a los niños. También a los profesores se les enseña a ser conscientes de sus propias emociones y a la gestión de las mismas y a ponerse en el lugar del otro, en este caso, de sus alumnos.

Segunda parte:
Análisis del artículo.


En el artículo anterior pudimos ver que el fracaso de los niños en esta asignatura no depende exclusivamente de ellos sino que existen factores que condicionan este mal rendimiento.
Una de ellas es “el miedo a las matemáticas” ya que las emociones tiene un efecto en los aprendizajes, un niño que le teme a estas puede sacar hasta 50 puntos menos en pruebas como el Simce. Que quiere decir esto que el profesor debe estar siempre preocupado de mantener un clima emocional agradable dentro de la sala de clases. Porque si bien el miedo a las matemáticas se desarrolla en básica es en media cuando se afloran los grabes problemas que estas ocasionan.
Muchas personas desertan en este ramo porque lo ven como caso perdido, que simplemente las matemáticas no se hicieron para ellos, analizando ahora este texto podemos decir que los grandes culpables de que existan tantos niños y jóvenes frustrados de las matemáticas son los profesores y su manera tan estructurada de pasar esta asignatura. Si se implantaran didácticas y motivaciones a los niños, existiría una gran alza de buenas calificaciones en esta asignatura y la percepción que tendrían los niños de las matemáticas seria más positiva, si los profesores se preocuparan de que sus alumnos entiendan en vez de solo pasar las materias se aprendería más y en menos tiempo. Si bien las matemáticas son exactas, existen mil y una formas para llegar al mismo resultado y es eso lo que tienen que hacer los docentes agotar todas las posibilidades y no quedarse en un solo método, demostrarles a los alumnos que ellos pueden crear su propio método de cómo llegar al resultado y que la matemática puede llegar hacer la mejor y más entretenida asignatura. Existe una frase que resume lo dicho “todo depende del umbral con que se mire” con esto quiero decir que si a los alumnos se les enseña desde pequeños todo tipo de formas para llegar a los resultados, ellos cambiarían la actitud frente a esta odiada asignatura. A modo de conclusión los profesores somos los agentes de cambio y si queremos mejorar la educación partamos por nosotros mismos.



No hay comentarios:

Publicar un comentario